Toda persona, día a día, pasa por diferentes experiencias que desencadenan múltiples emociones. Entendemos que la correcta canalización de estas es fundamental para poder estar en calma y así enfrentarnos de mejor forma a las distintas situaciones propias de la vida. Esto toma especial relevancia en niños y adolescentes, en cuya edad, de pleno desarrollo y constantes cambios, se hace necesario contar con este tipo de herramientas, que a su vez facilitan los procesos cognitivos propios de este grupo etario. El proyecto se enfoca en las emociones, su identificación, comprensión y búsqueda de estrategias para canalizarlas, a través de una propuesta lúdica y didáctica, potenciando en los niños el trabajo cooperativo, diálogo y aprendizaje vicario (por imitación mediante la observación de sus propios pares). Se trabajarán las emociones desde sus propias experiencias y contextos, tomando los niños un rol no sólo participativo sino que fundamental en la elaboración y desarrollo del trabajo.